El precandidato a intendente por Concordia Cambia Leandro Lapiduz aseguró esta mañana en diálogo con #TareaFina que en las PASO, si él no fuera candidato, “no votaría por ningún otro”. “No hay nadie que me convenza. Los conozco a casi todos, y no son lo que siempre dijeron, no hay nadie fiel a lo que siempre fue”, sostuvo.
Lapiduz se presenta en la interna de Juntos por el Cambio donde compite con otras cuatro precandidaturas: la de su correligionario Francisco Azcué; la de Eduardo Cristina; la de Julio Bogado; y la de Roberto Niez, que se sumó al espacio que él integra y que comanda Pedro Galimberti.
Azcué, Cristina y Bogado van con la boleta de Rogelio Frigerio. Sobre ellos, Lapiduz dijo que “todos sueñan en grande, pero ya tuvimos el sueño entrerriano. Más allá de soñar, la política tiene que trabajar”.
La llegada de Niez con su precandidatura fue cuestionada por Lapiduz. Dijo que su adversario en el espacio de Entre Ríos Cambia perdió dos precandidaturas y una interna y que pertenece “a otro momento de la política”. “Roberto tiene nivel de conocimiento, pero la UCR necesita caras nuevas. Pensamos que él tenía que venir a engordar, no a dividir, pero él pensó que lo mejor era ser candidato”, explicó. “Esos pensamientos no tienen que ver con una transformación para Concordia, porque nos debilitan. En lugar de sumar, dividen”, agregó, y reconoció que le sorprendió que Galimberti autorizara el pegado a Niez. “Debilita la oposición, nosotros trabajamos desde hace mucho, somos caras nuevas, creíamos que él tenía que sumarse y no aceptó”, repitió.
El precandidato anticipó que en las PASO de agosto también votará en blanco para las categorías nacionales. “Al igual que Pedro, a mi no me representa ninguna fórmula, porque no hay radicales encabezando”, sostuvo, en referencia a las declaraciones de su jefe político.
Lapiduz fustigó el rol que la conducción del radicalismo tuvo en la interna de Juntos por el Cambio en Entre Ríos y, particularmente, “el entreguismo” durante el cierre de listas. En ese sentido, contó que él también recibió propuestas para desistir de su incorporación con Galimberti y sumarse al espacio de Frigerio. “Pero por supuesto decidí continuar porque entiendo que el espacio de Galimberti es el que representa al verdadero radicalismo”, explicó.
Lapiduz es un empresario que con 37 años se consolidó en el ámbito gastronómico en la ciudad, continuando con la herencia familiar en el rubro. Desde ese lugar, ocupó y ocupa diferentes cargos en instituciones asociadas al sector, como la Federación Hotelera y Gastronómica a nivel regional y nacional. Con esa plataforma, consolidó su imagen pública como dirigente del sector y se unió a las filas de Galimberti en la campaña para las legislativas del 2021. Desde entonces, tributa en la UCR y este año decidió debutar en política.





