La candidata a diputada por el peronismo adelantó una campaña de cercanía. «Queremos escuchar. Tenemos claro que la baja de la inflación llevó calma a los hogares pero hay un ataque fuerte al ingreso familiar con el aumento en los servicios», dijo Marianela Marclay.
La funcionaria uruguayense ocupa el segundo lugar en la lista del peronismo como candidata a diputada en las legislativas de octubre. Reconoció que el partido «esta en reconstrucción» y anunció una campaña de escucha y cercanía. «Queremos escuchar pero también compartir una autocrítica de por qué somos oposición y no oficialismo en la provincia», declaró en diálogo con Radio Ciudadana de Concordia.
«Tenemos que revertir la lejanía que sufrió la militancia con la dirigencia peronista, tenemos que volver a las bases, apoyarnos en los militantes silenciosos, que vuelvan a ver que el peronismo es una opción que los pueda representar», apuntó.
En ese sentido, dijo que el peronismo está elaborando una campaña de «identidad propia, entrerriana, para discutir los intereses de la provincia». Apuntó a Rogelio Frigerio y dijo que «ha desertado la provincia». «Los municipios están gestionando en soledad, están gestionando a la deriva sin un paraguas nacional que los contenga», ejemplificó.
Sociedad atacada
Sobre el impacto del modelo económico del gobierno nacional, Marclay habló de «una sociedad muy atacada». Dijo que las familias están endeudadas, «aunque reconocemos que la inflación trajo calma a los hogares». Aún así, dijo que hay un «ataque fuerte» en el aumento de los servicios.
El desafío, entiende la candidata, será instalar al peronismo como opción al mileísmo. «El peronismo tiene cosas que funcionaron muy bien, como la obra pública, que tiene que volver como emblema de gobierno porque trae servicios a los barrios, agua, cloaca, luz, y genera mano de obra y activa un microsistema social», apuntó. «Sabemos lo que la gente no quiere y tenemos experiencia de lo que la gente sí quiere», agregó.
«Nuestra oposición es al gobierno nacional y provincial, nosotros proponemos un Estado presente, que reconozca los derechos sociales y a las personas. Quizás tengamos que revisar el formato de ese Estado, pero sí que haya intervención y restitución de derechos», cerró.